Recuperando nuestra vitalidad II
¿Cómo fueron las experiencias de la semana pasada?
Aquí os dejo alguna idea más:
No nos concedemos tiempo, o al menos muy poco, para sentir, para experimentar más plenamente nuestra vida. «Nos olvidamos de que nuestra capacidad de sentir es la esencia de nuestra vitalidad».
Yendo despacio descubrimos lo que es sentirse vital y vivo. Así es como nos convertimos en sentidores y seres, en lugar de limitar nuestra vida a ser sólo hacedores, y además hacedores autómatas. Es como si ni siquiera estuviéramos presentes.(Anat B.)
Cada día planifica hacer algo lento, durante diez minutos.
Elige una actividad como, una pausa para tomar café, caminar o cualquier otra. ¿Te sientes más creativa o energética?
¿Te animas a comprobarlo?
¡Que tengáis un estupendo día!